martes, 18 de agosto de 2015

EL CENTENARIO DE MANTA

https://www.youtube.com/watch?v=7aWoUB2YX1k&feature=youtu.be

EL CENTENARIO DE MANTA

Castillo ubicado en la parte alta del barrio Jocay
El centenario castillo de Manta fue construido a principio del siglo pasado y como primer dueño tuvo al francés nacionalizado suizo Karl Woelcker, que llegó al país por el año de 1898 a 1900 y se radicó en Manta conjuntamente con un hermano; el uno con tendencia de agricultura y el otro con tendencia industrial.

Lo construyó porque adquirió esa propiedad de 750 hectáreas para realizar sembríos; especialmente el piñón, la higuerilla y productos de ciclos cortos, como: sandía, melón, choclos, maíz, frijoles y se dedicó a la agricultura enteramente, y necesitaba vivir en el sector mismo para administrar su negocio, por eso construyó el castillo.

José Cevallos propietario del castillo, junto a Sonia
Delgado, reportera
Se dice que trajo planos de Europa, que hay similares castillos en los Alpes suizos, entonces trajo los planos de allá y lo construyó exactamente como existen allá.
En el año de 1943, él vende su propiedad, se la vende a los hermanos Cevallos (José padre del actual dueño junto a dos hermanos), que en conjunto compraron toda la propiedad y la llamaron hacienda “El Porvenir”, que se extendía desde el actual paso a desnivel en Tarqui hasta la "Y" de ingreso a Manta.

No vendieron los hermanos Cevallos. Los hermanos de don José deciden vender la propiedad en el año 46, tres años después que la adquirieron, porque ellos no eran muy agricultores, don José era un poco más que los demás. José decide comprarle las acciones a los hermanos y queda como dueño único de la propiedad en el año de 1946.
Posteriormente él continua con los sembríos del piñón, de la higuerilla; al inicio con éxito pero a partir del año 50 – 52 vino un famoso aluvión que se llamaba en ese tiempo cuando llueve demasiado y arraso con todo no dejó nada, fue un fenómeno del niño prácticamente. También un oleaje del mar donde se encontraron las aguas, tumbaron tres o cuatro casas y todo quedó devastado.

Entonces ya no se pudo continuar con el sembrío del piñón, la higuerilla, todo se perdió. El ganado se ahogó, hubo muchas pérdidas. Don José decide vender el ganado, lo vendió a precios bajos, incluso una parte la envió adonde un amigo en Chone y otra parte a Santa Ana.
De ahí vino la sequía y la tierra ya no producía, a don José no le quedó más que dividirla en parcelas (lotizarla), y comenzarla a vender ya para viviendas. Comenzó a vender desde la parte de arriba porque era propiedad grande. Vendió lotes grandes, después comenzó a vender lotes pequeños como el Jocay, el Porvenir. Hizo lotizaciones de acuerdo a la ley y tomadas en el municipio.

Hizo algunas donaciones para escuelas, iglesias, para otros tipos de instituciones. En alguna ocasión la escuela Umiña le dio un reconocimiento, el centro agrícola de Manta también que le donó terreno para construir una granja.
El resto fue parte del negocio de la lotización, que se deja áreas verdes, áreas comunales de acuerdo a la ley y por esa parte no había tantos reconocimientos, estaba ajustándose a los reglamentos de los negocios.

El castillo está ya en el Patrimonio Cultural, ya consta en el listado del Banco Central y del municipio de Manta declarado como patrimonio pero eso es teórico porque no se recibe ningún beneficio de parte de las instituciones, todo el mantenimiento, todo lo que se realiza ahí siempre es por cuenta del propietario.

No se ha abierto al público porque tendría que hacerse ya un negocio. No se puede decir solamente aquí está vayan y conozcan, eso tiene que ser bien organizado tener un guía, tener historia para explicarle a las personas, no ha habido esa oportunidad de hacerlo.
Don José tuvo que iniciar la venta de la tierra ante el fracaso de la agricultura o por la sequía, perdió mucho dinero, el ganado, los sembríos, todo entonces inició la venta de terrenos y por eso lado le fue bien, porque la ciudad creció y comenzaron a llegar migrantes de la provincia en busca de tierra y él aprovechó y vendía los terrenos, comenzó la venta a partir del año 56 – 57 y en la actualidad se ha vendido totalmente todo.

Adolfo continuó con el negocio, ya no quedan tierra solamente están haciendo escrituras las personas que le han comprado.

En la actualidad don Adolfo tuvo que comprar en otro lugar para poder atender mi clientela, vende por el sector de los artesanos en Montecristi.

El señor Adolfo tiene su casa en el mismo terreno donde está el castillo pero en dicha edificación no vive nadie.
La familia Cevallos Mendoza ahora alista un proyecto inmobiliario dentro de los predios que hoy ocupa el castillo. Se construirá una urbanización privada que constará de 200 casas.

El castillo será atractivo de central de la urbanización, para ellos se preveen obras complementarias que adornen la casona.